La aerotermia con suelo radiante es sin duda una de las opciones más eficientes para climatizar una vivienda, ya Problemas del suelo radiante por aerotermia: causas, prevención y soluciones
Tanto en pisos como en casas unifamiliares, el suelo radiante por aerotermia ofrece confort y eficiencia energética. Sin embargo, si no se diseña, instala o mantiene adecuadamente, pueden surgir problemas que afectan al rendimiento, la comodidad y el ahorro esperado.
En base a nuestra experiencia como instaladores, hemos recopilado los problemas más comunes del suelo radiante: por qué ocurren, cómo prevenirlos y qué hacer si ya los estás sufriendo.
Problemas del suelo radiante por aerotermia
Inversión inicial elevada
Instalar un sistema de aerotermia con suelo radiante requiere una inversión importante, especialmente fuera de obra nueva. Esto se debe a trabajos como nivelar suelos, integrar aislamiento, adaptar la instalación eléctrica y realizar obra civil.
¿Cómo se compensa?
- Estudio energético previo para estimar el ahorro a medio y largo plazo.
- Acceso a subvenciones y deducciones fiscales.
- Amortización media de 5-7 años en viviendas bien aisladas.
Pérdida de eficiencia en climas fríos
La aerotermia reduce su rendimiento cuando la temperatura exterior baja de 5 ºC. El sistema necesita más energía para mantener el confort interior.
Soluciones:
- Equipos Inverter con potencia sobredimensionada para clima frío.
- Sistemas de apoyo como resistencia eléctrica, solar térmica o caldera híbrida.
Inercia térmica elevada
El suelo radiante requiere tiempo para calentarse, ya que primero debe elevar la temperatura del hormigón antes de calentar el ambiente.
¿Cómo gestionarla?
- Programar el sistema para mantener una temperatura constante.
- Combinar con emisores rápidos (radiadores de baja temperatura o fancoils).
Condensación en modo refrescante
En modo frío, si el suelo se enfría por debajo del punto de rocío, puede producirse condensación, con riesgo para pavimentos y mobiliario.
Prevención:
- Instalar sondas de humedad y sensores de punto de rocío.
- Usar deshumidificadores o ventilación controlada.
- Limitar la temperatura mínima del agua en verano.
Distribución desigual del calor
Zonas más frías o calientes dentro de la misma vivienda suelen deberse a un diseño hidráulico deficiente o un aislamiento irregular.
Solución:
- Cálculo técnico adecuado de caudales y longitudes.
- Colectores con válvulas de equilibrado hidráulico.
- Aislamiento térmico homogéneo en toda la vivienda.
Fugas en la instalación
Aunque poco frecuentes, las fugas pueden deberse a errores en la instalación o materiales de baja calidad.
Actuación recomendada:
- Apagar el sistema y revisar presión.
- Solicitar prueba de estanqueidad para localizar la fuga.
- Reparar priorizando zonas accesibles desde colectores.
Impacto visual y sonoro de la unidad exterior
La bomba de calor exterior puede resultar molesta si no se elige ni se ubica correctamente.
Recomendaciones:
- Seleccionar modelos silenciosos (40-55 dB).
- Ubicarla en zonas protegidas (patio, cubierta, caseta).
- Usar soportes antivibración y barreras acústicas si es necesario.
Necesidad de permisos y obra
La instalación puede requerir trámites administrativos, sobre todo en reformas y comunidades de vecinos.
Consejo:
- Contratar un instalador que gestione permisos y proyecto.
- Evaluar alternativas si no hay espacio exterior.
Sobrecarga eléctrica
Un sistema de aerotermia exige una potencia contratada adecuada. En algunos casos, será necesario ampliarla.
Prevención:
- Estudio de cargas antes de la instalación.
- Valorar tarifas con discriminación horaria o autoconsumo fotovoltaico.
Cómo prevenir problemas desde el inicio
- Realizar un estudio energético profesional.
- Evaluar el nivel de aislamiento de la vivienda.
- Verificar compatibilidad del pavimento con suelo radiante.
- Confirmar espacio suficiente para la unidad exterior.
- Contar con instaladores certificados.
- Establecer un plan de mantenimiento preventivo.
Problemas comunes en sistemas ya instalados
Suelo radiante no calienta
Puede deberse a baja presión, aire en el circuito, bomba parada, válvulas cerradas o mal uso del termostato.
Una habitación no calienta
Fallos localizados suelen estar ligados a desequilibrios hidráulicos, válvulas cerradas o termostato averiado.
Caudalímetro no funciona
Si no gira o marca mal, puede haber cal, suciedad o fallo mecánico. Revisar y limpiar.
El sistema tarda mucho en calentar
Podría ser una combinación de baja temperatura de impulsn de baja temperatura de impuls\u00i3n, mala regulación, o alta inercia térmica sin compensación.
Hace ruido
El ruido indica aire en el circuito, dilataciones o fijaciones incorrectas. Es necesario purgar y revisar sujeción de tuberías.
Pérdida de presión
Si la presión baja con frecuencia, puede tratarse de una fuga, purgador defectuoso o problema en el vaso de expansión.
Problemas en el colector
Puede haber válvulas atascadas, caudales mal equilibrados o pequeñas fugas. La limpieza periódica es esencial.
Termostato no responde
Un termostato averiado o mal ubicado afecta al confort y a la eficiencia. Revisar alimentación, sensores y ubicación.
Problemas de humedad y condensación
Condensación en modo frío
Es uno de los mayores riesgos. Se produce cuando el suelo está más frío que el punto de rocío del aire ambiente.
Prevención:
- Sensores de humedad y temperatura de superficie.
- Control por zonas y ventilación adecuada.
Humedad por mal aislamiento
Si la envolvente de la vivienda no está bien aislada, pueden formarse condensaciones no deseadas.
Condensación en muebles y paredes
Zonas estancas o sin ventilación pueden provocar humedad secundaria. Reforzar ventilación y usar sondas por estancia.
Mantenimiento del suelo radiante para evitar fallos
Purgado periódico
El aire en el sistema reduce el rendimiento. Es esencial purgar tras la instalación y una vez al año como mínimo.
Revisión anual
Revisar presión, vaso de expansión, termostatos, bombas y válvulas. Idealmente antes del invierno.
Limpieza del colector
El colector puede acumular cal o lodos. Una limpieza anual ayuda a mantener los caudales equilibrados.
Reactivación tras meses de inactividad
Antes de volver a poner en marcha el sistema (por ejemplo, en otoño), conviene revisar purgas, caudales y presión.
Qué hacer si ya tienes problemas con tu sistema
- Comprueba el termostato y la programación.
- Verifica la presión del circuito.
- Solicita una revisión técnica del sistema completo (unidad exterior, colectores, bombas).
- Considera limpiar filtros y revisar los caudalímetros.
- Valora actualizar el sistema de control (termostatos, sensores).
La mayoría de los problemas con el suelo radiante por aerotermia se deben a errores de diseño, instalación o falta de mantenimiento. Contar con profesionales certificados desde el principio es la mejor garantía para evitar averías y garantizar un confort térmico real y duradero.
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