La transición hacia energías limpias ha puesto a la aerotermia y la geotermia en el punto de mira como alternativas sostenibles a las calderas de gas o gasoil.
Ambos sistemas utilizan bombas de calor para aprovechar recursos naturales (aire o subsuelo) y proporcionar calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria (ACS) durante todo el año.
¿Qué es la aerotermia? Energía del aire ambiente
La aerotermia extrae la energía térmica contenida en el aire exterior para transferirla al interior de la vivienda mediante un ciclo termodinámico. Incluso con temperaturas bajo cero, este sistema puede captar calor suficiente para climatizar.
Eficiencia de la aerotermia
- COP medio: 3,5–4,5 (produce entre 3,5 y 4,5 kWh térmicos por cada kWh eléctrico consumido).
- Eficiencia variable según temperatura exterior (mejor en climas templados).
Instalación de un sistema de aerotermia
- Necesita unidad exterior (similar a un aire acondicionado) y unidad interior.
- Instalación sencilla, sin perforaciones de terreno.
- Compatible con suelo radiante, radiadores de baja temperatura y fan coils.
Precio e inversión inicial de la aerotermia
- Coste medio instalación: 8.000–15.000 € según potencia y emisores.
- Menor inversión inicial que la geotermia.
- Amortización habitual: 5–7 años.
¿Qué es la geotermia? Energía que emana de la tierra
La geotermia utiliza sondas enterradas a 100–150 metros para captar la temperatura estable del subsuelo, que ronda los 15 °C todo el año, garantizando un rendimiento constante.
Eficiencia de la geotermia
- COP medio: 5–6 (produce 5–6 kWh térmicos por cada kWh eléctrico).
- Rendimiento estable sin importar la temperatura exterior.
Instalación de un sistema de geotermia
- Requiere perforaciones verticales o captadores horizontales.
- Instalación más compleja, necesita espacio y permisos.
- Ideal para viviendas con terreno disponible.
Precio e inversión inicial de la geotermia
- Coste medio instalación: 18.000–30.000 €.
- Mayor inversión inicial pero menor gasto anual en consumo.
- Amortización habitual: 8–12 años.
Funcionamiento de las bombas de calor en ambos sistemas
Tanto en aerotermia como en geotermia, el principio es el mismo:
- Captar calor de una fuente (aire o tierra).
- Comprimir el refrigerante para aumentar su temperatura.
- Transferir el calor al agua de calefacción o ACS.
- Expandir y enfriar el refrigerante para repetir el ciclo.
Comparativa aerotermia vs geotermia
Característica | Aerotermia | Geotermia |
---|---|---|
Fuente de energía | Aire exterior | Temperatura estable del subsuelo |
COP medio | 3,5–4,5 | 5–6 |
Instalación | Sencilla, con unidad exterior | Compleja, requiere perforaciones |
Espacio necesario | Poco, solo unidad exterior | Terreno para perforaciones o captadores |
Precio instalación | 8.000–15.000 € | 18.000–30.000 € |
Rendimiento en frío extremo | Disminuye | Se mantiene estable |
Mantenimiento | Bajo | Bajo |
Amortización | 5–7 años | 8–12 años |
Factores para elegir entre aerotermia y geotermia
Características de la vivienda
- Si tienes terreno disponible y buscas rendimiento máximo todo el año → Geotermia.
- Si tu vivienda no dispone de espacio exterior suficiente para perforaciones → Aerotermia.
Ubicación y clima
- Climas muy fríos: geotermia rinde más.
- Climas templados: aerotermia ofrece gran eficiencia a menor coste.
Inversión inicial y amortización
- Aerotermia requiere menor inversión inicial.
- Geotermia ofrece más ahorro anual pero con recuperación más lenta.
Ayudas y subvenciones
En España, ambos sistemas pueden acogerse a ayudas del Programa de Rehabilitación Energética (PREE) y subvenciones autonómicas para instalaciones de aerotermia, que cubren hasta un 35–70% de la inversión.
Consumo y ahorro a largo plazo
- Aerotermia: ahorro del 50–70% frente a caldera de gas.
- Geotermia: ahorro del 60–75% frente a caldera de gas.
¿Cuál te conviene más?
La elección depende de tu presupuesto, espacio y clima:
- Si buscas instalación más sencilla y menor inversión inicial → Sistemas de Aerotermia.
- Si priorizas máxima eficiencia y rendimiento constante → Geotermia.
En cualquier caso, ambos sistemas reducen drásticamente el consumo energético y las emisiones, aportando confort y sostenibilidad a largo plazo.